domingo, 29 de octubre de 2023

El almanaque de mi padre (Jiro Taniguchi)



Título original: Chichi no koyomi.

"Al morir su padre, al que hacía años que no veia, Yoichi asiste a su funeral con cierta sensación de alejamiento emocional. Su padre es para él un virtual desconocido, por el que nunca ha sentido demasiado afecto y al que ha llegado a considerar como un ser mediocre y oscuro. A través de recuerdos borrosos, de comentarios de allegados de su padre y de fotografías, el protagonista irá recomponiendo una imagen más compleja de su padre a la vez que arrojando nueva luz sobre su relación con él y con su madre". Este es el texto que puede leerse en la contraportada de esta edición del manga de Taniguchi, que he copiado porque me ha parecido acertado y pertinente. 
La sensación al leerlo ha sido ambigua. Por un lado, en comparación con otras obras del mismo autor, me ha atrapado poco durante la lectura, de modo que lo he ido leyendo a pequeños picotazos durante semana y media a pesar de no ser muy extenso. Por otro, conforme conocía más detalles de los principales personajes percibía que éstos me resultaban más atractivos y que me vinculaba con ellos emocionalmente en cierta medida. Si bien la valoración que hago es positiva y, una vez más, compruebo que Jiro Taniguchi plantea sus historias de un modo atractivo, el sabor de boca que me deja es ligeramente menos especial que en otras ocasiones, a lo mejor porque ofrece una propuesta menos original. Así, en el caso de El caminante, se trata de pequeñas historias casi sin argumento donde el hombre protagonista observa con atención, a veces interactuando, a quienes se cruzan con él en su paseo cotidiano; se trata, por tanto, de un manga que trata de mostrar lo bonito de lo cotidiano y de fijarse en el presente. En el caso de Barrio lejano resulta imposible explicar en qué consiste la originalidad de su planteamiento -relativa en todo caso, pues en algunas películas se ha propuesto algo similar- sin adelantar demasiado, así que solamente diré que, como en El almanaque de mi padre, narra el reencuentro con un entorno casi olvidado, y sí tiene esa magia particular que esta vez, aunque también esta presente, aparece en menor grado.
En cualquier caso, os aseguro que Taniguchi siempre agrada y os animo a leer alguna de sus obras, absolutamente interesantes para un público adulto.


 

miércoles, 18 de octubre de 2023

Leyendas negras, marcas blancas (Sebastiaan Faber)




El autor, catedrático de Estudios Hispánicos en el Oberlin College (EE.UU.), habla en estas páginas del modo en que España observa con una atención particularmente especial e intensa lo que otros países afirman, opinan y valoran sobre cualquier aspecto español. 
Afirma que la marca de país, idea que pulula desde hace años con vistas comerciales y políticas, ha calado hondo en muchos territorios, y que en el territorio español las altas esferas tienden a tomarse como una deshonra imperdonable cualquier valoración negativa o siquiera crítica. De ahí nacen exabruptos rancios, de ahí se deducen autoestimas mal asentadas. Además, Faber considera que definir lo español tiende a estandarizar o difuminar los rasgos característicos de cada una de las regiones, las culturas, etc. que componen el diverso país que es el nuestro.

Considero este breve librito interesante, si bien en esencia narra lo dicho de una manera bastante sucinta, y deja ganas de bastante más. Me ha dejado la sensación de que podría haberse ido más profundo. En cualquier caso, es una oportunidad para analizarse a uno mismo y valorar cuánto de ese miedo a no ser suficiente, de ese sentirse de menos en comparación por ejemplo con la idea que tenemos de Europa, hay en nuestra propia cabeza.



 

miércoles, 11 de octubre de 2023

El silencio y los crujidos (Jon Bilbao)

 



Jon Bilbao presenta en esta novela tres historias independientes, pero con un nexo común: hablan cada una de una persona que, por el motivo que sea, desea estar sola. En el caso del primer relato, denominado Columna, asistimos a la vida de un estilita, es decir, de alguien que por motivos religiosos se sube a una columna y pasa su vida en ella, malviviendo de lo que los visitantes le llevan. En el segundo, Tepuy, un hombre convence a un piloto de helicóptero para que le lleve a un tepuy venezolano (un terreno llano muy alto e inaccesible) con el objetivo de estudiar una especie endógena de ranas. Y en el tercero, Torre, un hombre compra y remodela una torre en Menorca en la que vivir aislado, tratando de ignorar a todo el mundo, pues años atrás inventó una web de gran éxito que generó muchos detractores hacia su persona.
A lo largo de estas páginas asistiremos y trataremos de desentrañar los motivos, no necesariamente tan claros como los descritos, por los que cada uno de ellos busca la soledad, cómo la viven, cuáles son sus deseos, y esto nos permitirá reflexionar sobre asuntos como la independencia que se consigue, quizá, al llevar una vida tan distinta o la necesidad que es posible que tengamos de estar con otros.
Ya cuando leí Shakespeare y la ballena blanca, en el que conocíamos al célebre dramaturgo británico en una travesía en barco y sus pensamientos respecto a la escritura, su época histórica y otros asuntos, observé que este escritor suele decantarse por temáticas potentes, situaciones inusuales, y lo hace a través de una escritura cuidada, elegida pero accesible. Leerlo deja la sensación de que hay más debajo de sus palabras de lo que de primeras uno llega a captar.

lunes, 2 de octubre de 2023

Cisne y murciélago (Keigo Higashino)

 



Título original: Hakucho to Komori.

El autor es un superventas en algunos paises asiáticos y desde hace unos años algunas de sus novelas han sido traducidas al español. Suele escribir thrillers, o más bien historias de misterio donde hay algún crimen y las correspondientes pesquisas.
Es el caso de estas páginas. Los policías que llevan buena parte de la investigación, Godai y su ayudante Nakamachi, analizan el crimen de un abogado cuyo cuerpo apareció en el asiento trasero de su coche en un barrio al que nunca solía ir. A partir de ese momento, se sucederán muchos descubrimientos: nuevos detalles extraños, alguna persona que reconoce el crimen, familiares del acusado que investigan por su cuenta para cerciorarse de cuánto de verdad hay en todo el asunto... No entraré en más detalle para, a diferencia de la contraportada de esta edición, evitar que el lector potencial conozca a grandes rasgos cerca de la mitad de la trama antes de comenzar.
Se trata de un libro más bien extenso, con no pocos personajes aunque sin llegar a la exageración, y con una manera de narrar los hechos que permite descubrir nuevos datos a la par que los personajes que protagonizan la historia. Resulta muy natural el modo en que, con lentitud, los sucesos acontecen, las investigaciones avanzan y se profundiza en los detalles del caso. Para bien o para mal, esto a juzgar por quien se acerque a este título, la historia se desarrolla con lentitud, y lo que esencialmente uno puede encontrar son conversaciones entre los familiares y los policías, o entre los familiares que buscan información por su cuenta y aquellos a quienes desean preguntar. Es decir, no se trata de una historia de acción, ágil, con persecuciones o escenas así. Si bien el desenlace me ha parecido correcto, tampoco me ha resultado particularmente inesperado, pero en general me ha permitido comprobar una vez más que Higashino tiene muy claro desde la primera página lo que quiere contar y estudia los detalles escrupulosamente antes de iniciar la escritura.
En este sentido, quizá sea algo más original y brillante el título que leí anteriormente de este mismo autor, La devoción del sospechoso X, con una cantidad irrisoria de personajes y, en algunos momentos, un desarrollo excelente de los diálogos, de la evolución de la narración, que juega muy bien con dicha exigua cantidad de personajes, un poco recordando a Colombo o
al clásico La Huella.
En cualquier caso, un autor para recordar de vez en cuando.