sábado, 13 de septiembre de 2014

Acoso y fuga (Philip Agee).



Título completo: Acoso y fuga. Con la CIA en los talones.
Título original: On the run.
El autor cuenta, mediante una biografía novelada –o la mera narración de una vida de novela, también se podría decir- todo lo que le sucedió desde que en 1974 dejó de trabajar para la CIA y se dedicó a comentar al mundo los verdaderos motivos de la existencia de esta agencia y los métodos de que ésta se sirve para alcanzarlos.
Agee escribió otros libros en los que prestaba una atención más directa a los hechos políticos, históricos, etc. de los que tuvo conocimiento y en los que tuvo cierto rol principal al ser él, como ex agente de la CIA, una persona idónea por conocer el funcionamiento de la agencia y por tanto poder ayudar a destapar a quienes trabajan para ella en multitud de países del planeta. En este libro, como he dicho, aunque también ofrece multitud de ejemplos de este tipo, los cuenta en primera persona, tras haberle propuesto hacerlo un editor conocido suyo y haber comprobado que cuando daba conferencias por el mundo mucha gente se interesaba por su extraordinaria vida más que por los hechos generales en sí en que intervino o que conocía.
Debo señalar que el libro es muy extenso y excesivamente prolijo en detalles, lo cual hace de la interesantísima lectura todo un alarde de paciencia y constancia si se desea completar. Por lo demás, al menos para alguien con unos conocimientos básicos de la Historia con mayúsculas, las innumerables afirmaciones del autor acerca de la CIA en centenares de conocidos episodios históricos de, a su vez, infinidad de países me dejó boquiabierto y, una vez más, preguntándome por qué estas cosas no salieron nunca de la boca de mis profesores de Historia del instituto. Así, en estas líneas podréis leer sobre Cuba, Nicaragua, Allende en Chile, varios países africanos, Nixon, Reagan y un largo etcétera, así como de los incontables escollos que la CIA regalaba a Agee para tratar de detener su tarea: anulación injustificada de pasaportes, mentiras difundidas en los medios de comunicación, seguimientos, expulsión de varios países, requerimiento de censura antes de la publicación de sus libros, escuchas telefónicas...
Miedo da pensar, después de leer Acoso y Fuga, la de tramas desconocidas que pueden estar desarrollándose, teniendo como sede –por ejemplo- ciertas sedes diplomáticas, en cualquier parte del mundo en la que se estime que los intereses neoliberales de los mandamases estadounidenses empiezan a correr peligro.



No hay comentarios:

Publicar un comentario