Título en la edición en español:
El círculo oscuro.
Autor: Douglas Preston y Lincoln
Child.
En un monasterio tibetano se
produce el robo de un misterioso objeto, el Agozyen, al que se le atribuyen
enormes poderes que no deben ser expuestos al mundo. El agente del FBI,
Aloysius Pendergast, y su compañera y ayudante, Constance Green, han acudido
para aprender meditación y se apresuran a investigar el robo, que al parecer ha
sido llevado a cabo por un visitante que ya marchó. Ello les llevará hasta el transatlántico
Britannia…
Preston y Child tienen sus
propias novelas pero también escriben algunas a cuatro manos, como es el caso
de la presente. Los protagonistas aparecen en otras más, aunque pueden leerse
separadamente –y en cualquier caso los autores ofrecen indicaciones al respecto
al comienzo o al final del libro-. Estamos ante la típica historia entretenida
en la que se entremezclan suspense, aventura, acción, pequeñas sorpresas y
muchas ganas por saber cómo se solucionarán las diferentes situaciones en la que
los personajes se ven inmersos.
Me ha parecido algo larga y tengo
dudas respecto al hecho de mezclar, aunque no en exceso, una historia
inicialmente realista con elementos esotéricos. En cualquier caso, se lee con
relativo interés y permite disfrutar de sus quinientas páginas con bastante
facilidad.